El domingo 1 de junio, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, se acercó a conocer las instalaciones del nuevo Centro de Internamiento de Menores Infractores (CIMI) que la Junta de Andalucía va a abrir esta semana en Churriana, un barrio de la ciudad. También coreaban cánticos contra Alberto Benito, el hombre que ha alquilado el inmueble donde se instala el CIMI a Meridianos, la empresa que se va a encargar de su gestión y de los 50 menores que ingresarán allí en «régimen cerrado, semiabierto, abierto y de permanencia de fin de semana», según la licitación que publicó el Gobierno andaluz. El nuevo centro de internamiento de menores infractores se abre en una antigua residencia de monjas, sobre una edificación de 1.594 m², mientras que en los pliegos de prescripciones técnicas y en la memoria justificativa del concurso de adjudicación se establecían una serie de requisitos materiales mínimos, como que el CIMI tuviera una sede con al menos 2.822,5 m².
Author: Andros Lozano
Published at: 2025-06-10 22:19:03
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