No deja de ser una paradoja que sea hoy un tipo como Donald Trump, por lo que representa, quien se erija como el adalid del proteccionismo mientras enfrente tiene al Partido Demócrata que se supone rechaza la política arancelaria. Va a lo suyo, a dar satisfacción a una parroquia incondicional, la misma que asalta el Capitolio o que le importa un bledo cualquier atropello o abuso por condena firme que haya de por medio. Sabe a qué juega, y va con todo, ajeno a las críticas de medio mundo y consciente que da satisfacción a millones de estadounidenses desesperados, quemados o asqueados de su actual vida y su futuro.
Author: Sergi Sol
Published at: 2025-04-06 17:39:09
Still want to read the full version? Full article