El imparable ascenso de la formación de Nigel Farage ha llenado de preocupación estos días el Centro de Exhibiciones de Liverpool, donde miles de militantes se han congregado para encontrar soluciones al hundimiento en las encuestas, y ha obligado a su líder a endurecer el tono contra sus rivales. “Todos podemos ver estos vendedores de humo, a izquierda y a derecha, pero no tengáis ninguna duda: a ninguno de ellos le interesa la renovación nacional porque el declive es bueno para su negocio”, ha remarcado Starmer, quien ha acusado a Farage de “no gustarle” el Reino Unido y de apelar a los agravios y a la indignación para captar votos. Pero tanto el primer ministro como la ministra de Economía, Rachel Reeves, han alertado de que romper con las estrictas normas fiscales supondrá “perder el control” de la economía y serán las familias trabajadoras las que acaben pagando el precio, como ya ocurrió con el mini presupuesto de la exprimera ministra Liz Truss.
Author: Lucas Font
Published at: 2025-09-30 17:16:51
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