Los avisos típicos que se ven con más frecuencia son revisiones programadas, aceite, filtros, líquido de frenos, presión o estado de neumáticos y baterías (tanto la de 12 V como la de tracción en híbridos y eléctricos). En mi caso en concreto, lo que me ha ganado no es el detalle técnico, es el efecto en la cabeza: te quitas de encima esa sensación de “no sé si toca revisión, no sé si esa luz era importante, no sé cuándo miré lo de los neumáticos”. Al final, la integración coche-móvil bien hecha no es un extra: es una forma de que el coche te avise en el momento en el que tú puedes reaccionar.
Author: Manuel Naranjo
Published at: 2025-12-21 13:30:59
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