A algunos elementos, según la publicación ucraniana Deepstate, que se dedica a monitorizar el campo de batalla a través de vídeos y fotos publicadas en internet, los situaron no sólo cortando las grandes defensas ucranianas construidas a las afueras de Pokrovsk, que cuentan con tres capas de fosos, dientes de dragón y campos minados, sino que el día 11, siempre según la anterior publicación, alcanzaron en algún punto la carretera que une la zona de Kramatorsk, el corazón del Donbás ucraniano, con el resto del país. Para algunos analistas, que reconocen que la situación en el campo de batalla es «difícil», no se trata tanto de un avance ruso o una ruptura del frente sino de un intento de sabotaje y de infiltración para explorar las grietas que Ucrania va dejando en su defensa por falta de rotación en sus unidades más agotadas en un frente de combate tan largo como este (800 kilómetros de largo). La misión de infiltración, llevada a cabo por unidades de las fuerzas especiales rusas y elementos de la 132 brigada de fusileros motorizados, ha conseguido llevar el pánico a la retaguardia ucraniana y mostrar las enormes deficiencias de un sistema defensivo que ya no es capaz de tapar todos los huecos por falta de infantería y los problemas de reclutamiento.
Author: Alberto Rojas
Published at: 2025-08-13 20:58:23
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