Y, sin embargo, la opinión pública mundial, controlada por la izquierdona totalitaria y la derechona dogmática, aún no quiere enterarse de la novedad que ha traído al mundo la nueva Administración norteamericana. No fue una exhibición de fuerza, como ha dicho la derechona, ni menos aún la actuación de un histrión, como acostumbran a repetir los medios totalitarios de la izquierdona. De ahí mi contento y satisfacción por la fantástica recepción que Trump le dio a Putin (o quizá a su doble o triple, para el caso da igual) en Alaska; le puso alfombra roja y lo montó en la Bestia, fue toda una exhibición de alta diplomacia, una sutileza para "embarcar"al primer representante del único invento de la izquierdona mundial: la agitación y la propaganda.
Author: Agapito Maestre
Published at: 2025-08-20 19:47:52
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