Esto, que debería estar ya normalizado en un estado del bienestar, sigue tambaleándose porque no somos conscientes de la importancia y las ventajas de tener una sanidad pública, sin que precisamente tengamos que recurrir a un préstamo bancario para hacer frente a una cirugía o para pagar la estancia en un hospital, y donde la condición social no sea un condicionante para abordar el tratamiento de una afección. Curiosamente, durante el período que estuve ingresado, el artista Sabotaje al Montaje pintó un mural en las inmediaciones del HUC en el que homenajeaba al personal de dicha institución pública, concibiendo esa obra como un ejercicio de memoria colectiva para valorar el avance social que supone disponer de una sanidad pública de calidad como la que tenemos en la actualidad. Al respecto, hay que insistir en que la inversión pública en los servicios y las prestaciones sanitarias es crucial porque todos nos beneficiamos de ellos, abarcando desde la formación universitaria, de donde salen los profesionales de las distintas especialidades, hasta la propia infraestructura hospitalaria, que nunca debe depender de contribuciones privadas, pasando por la adquisición y renovación periódica de recursos que ayuden a las pruebas de diagnóstico, sin olvidar la investigación científica, base fundamental de la lucha contra las enfermedades.
Author: Francisco Javier León Álvarez
Published at: 2025-09-10 16:07:21
Still want to read the full version? Full article