Lo que más duele no es el desarraigo

Lo que más duele no es el desarraigo


De aquellos años, mi padre –el Gran Capitán– recordaba varias cosas, hipérboles que él adornaba y tergiversaba a gusto y con un talento impresionante para convertir cualquier control de pasaportes en una pieza de Borís Pasternak. Mi padre se quedaba solo todo el día hasta que ellos regresaran de trabajar –de lo que fuera, de lo que encontraran, de lo que hubiese: eran inmigrantes, apestados, perdedores de la guerra, o todo eso junto–. Cicatriza luego la tumoración de no estar en un espacio específico o de dejar de ser una persona determinada –el español o la española, el catalán o la catalana– para dar paso a un estadio más amplio.

Author: (abc)


Published at: 2025-11-15 18:12:41

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