La llegada Biskek te deja a tiro de piedra de varios lugares de interés que se pueden visitar desde la propia ciudad (a la que hay que dedicarle al menos un día para ver lugares como la Plaza de Ala Too; el precioso Museo Nacional de Kirguistán (con unas colecciones brutales sobre las culturas nómadas), la Mezquita del Imam Sarashi y el Bazar de Osh, uno de los mercados más grandes y pintorescos del Asia Central. A dos pasos de la capital tenemos dos hitos que bien merecen un día cada uno: el Parque Nacional Ala Archa para hacer senderismo entre glaciares y cascadas y el dúo que forman la Torre Burana (un minarete del siglo IX rodeado de cientos de estelas de piedra con forma humana que nos lleva a los tiempos gloriosos de la Ruta de la Seda) y el Valle de Chon-Kemin (no es mala idea pasar la primera noche fuera de Bishkek en Chon Kemin). Aquí vas a gastar entre seis y ocho días para ir y venir a los lugares que están marcados en verde como imprescindibles: la ciudad de Karakol (otra de las postas históricas de la Ruta de la Seda); la Garganta de Jeti-Oguz (aquí puedes ver formaciones rocosas impresionantes como los Siete Toros o el Corazón Roto); las aguas termales de Altyn-Arashan y el Cañón Skazka con el pequeño pueblo de pueblo de Tosor: aquí vas a poder tener el primer contacto con la cultura nómada.
Author: Viajar Ahora
Published at: 2025-12-14 14:56:49
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