Con excepciones, sí, como esa cincuentona de melena rubia y blusa rosa demasiado corta y con transparencias que es capaz, ella sola, de animar (con escaso éxito, hay que decirlo) a dos mesas, la suya, donde se sienta con su marido (o lo que sea) y la de al lado, que de vez en cuando se sacude la modorra y la acompaña. Por no mencionar el atractivo que, sobre todo para los españolitos de a pie, tiene hacerse una foto en una de las típicas cabinas rojas británicas estratégicamente colocadas desde Casemates Square, la plaza principal del parque temático british al que se accede por el túnel desde Castle Road y que desemboca en el Cable Car, el teleférico que eleva hordas de turistas a las alturas de la Roca, donde los barbary macaques (los monos de Gibraltar) siguen siendo el mayor reclamo. La pareja y los amigos que les acompañan llenan de risas el oscuro interior de The Horseshoe a mediodía del sábado, cuando los bares de la Calle Real (que es como traducen al español la Main Street) se empiezan a llenar de turistas para tomar el lunch, para almorzar, que aquí son british también en los horarios, aunque la cocina tarde luego en cerrarse más de lo previsto.
Author: Chema Rodrígez, Gogo Lobato
Published at: 2025-08-18 20:56:14
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