Con la firma ayer por parte del presidente de Ucrania de la polémica ley 12414, que acaba con la independencia judicial de las dos agencias antifraude de Ucrania (Oficina Nacional Anticorrupción o NABU y la Fiscalía Especializada Anticorrupción o SAPO) , Zelenski tomó una decisión de incalculables consecuencias para su gobierno y abre su peor crisis política desde que llegó a la Casa de las Quimeras. La Unión Europea ve en la maniobra un movimiento de control sobre la justicia más propio de un Viktor Orban que de un Zelenski en el que se confiaba hasta ahora, pero la confianza es como la pasta de dientes: una vez que la sacas del tubo ya es difícil volver a meterla. Los manifestantes reunidos ayer en la plaza del teatro Iván Frankó, algunos de ellos militares veteranos con prótesis y heridas de guerra, a tiro de piedra de la oficina del presidente, gritaban dos consignas: la primera, «veto a la ley» y la segunda, «Yermak fuera».
Author: Alberto Rojas
Published at: 2025-07-23 17:02:24
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