Horas después de saborear un gran filete a la parrilla en una hermosa tarde de verano, tu cuerpo se vuelve traidor, declarando la guerra a la misma comida que acabas de disfrutar. Cuando una dosis alta de alfa-gal entra en el torrente sanguíneo a través de la picadura de una garrapata, puede provocar que el sistema inmunitario se sobrecargue y genere anticuerpos contra dicha molécula. Sin embargo, informes locales y globales han identificado muchas especies diferentes de garrapatas en seis continentes capaces de causar esta afección, incluida la prolífica garrapata de patas negras o garrapata del ciervo, que también transmite la enfermedad de Lyme.
Author: Forbes Staff
Published at: 2025-08-17 15:00:00
Still want to read the full version? Full article