A los muchos idealistas que en Europa quieren defender a Ucrania en base a los principios, aunque no dicen cómo, se oponen unos pocos realistas que creen que nunca se debió ampliar la OTAN, que Ucrania es parte de Rusia y que por tanto hay que satisfacer en alguna medida las exigencias de Putin. Cuando ésta perdió la Primera Guerra Mundial, se firmó un tratado de paz, no una rendición, y aunque se hizo lo suficiente para humillarla imponiéndole unas reparaciones de guerra colosales, que por cierto nunca pagó, no se hizo lo bastante para evitar que se recuperara e intentara vengar la afrenta sufrida. Al final, con Alemania, hubo que derrotarla hasta que se rindiera incondicionalmente y, salvo que los rusos cambien, que no tienen pinta de hacerlo, habrá que hacer con ellos lo mismo.
Author: Emilio Campmany
Published at: 2025-08-19 20:44:20
Still want to read the full version? Full article