Gana Simon Yates y Jeffrey Lebowsky se viste de amarillo en el Tour de Francia

No se pone el grito en el cielo porque estuvo bien el final, y porque la fuga era de quilates, y porque llevamos una carrera desgastadora, asesina, corrida en plan clásica (casi) a diario, con un equipo que está en plan camina o revienta y un líder que camina como ningún otro (y un nuevo líder que mola más que una farra cualquier fiesta de pueblo). Empieza la rampa final y ataca Simon Yates, que quiere trincar su cuota de protagonismo rápido para: a) no dar dos pedales en todo el Tour, no jodas; o b) ayudar a su líder una vez que cumplió el objetivo primero de su equipo (el Yates Bikes Bros), que no era sino este éxito. Ben Healy va a ser el primer amarillo de la historia que sale con manchas de ketchup en el maillot, repartiendo flyers para la hora feliz y con un grinder en el bolsillo trasero.

Author: Marcos Pereda

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