Esa es la opinión de algunos de los moscovitas que pasan por la estación Taganskaya del metro de la capital rusa, luego de que las autoridades reinstalaran en el lugar una estatua de Josef Stalin. La institución aseguró que la nueva versión del monumento, presentada al público el 15 de mayo, fue uno de sus “regalos” a los pasajeros para conmemorar el aniversario número 90 de la red de metro, conocida por la belleza clásica de sus estaciones. La rama moscovita de la formación emitió una protesta formal contra lo que denominó la devolución de un monumento a “un tirano y un dictador” y exigió que el metro de Moscú se centrara en conmemorar a las víctimas de la represión estalinista: ”La devolución de los símbolos del estalinismo a Moscú es una burla a la historia y una burla a los descendientes de los reprimidos”.
Author: Bastián Díaz
Published at: 2025-05-28 20:11:13
Still want to read the full version? Full article