En 1934 un aristócrata ruso se autoproclamó rey de Andorra. En realidad era el estafador más loco del siglo XX

En 1934 un aristócrata ruso se autoproclamó rey de Andorra. En realidad era el estafador más loco del siglo XX


A ese extenso currículo se añade su condición de pendenciero, bebedor nato, amante de la buena mala vida, seductor, cazafortunas y poseedor de una moral elástica que entre otras cuestiones le permitió actuar como espía triple (cuentan que ejerció como tal para Alemania, Gran Bretaña y Estados Unidos) y sobrevivir en campos de concentración y gulags, aun a costa colaborar con los nazis. Sus problemas con la ley le persiguen, pero él logra apañárselas para ganarse la confianza de dos mujeres: Marie Louise Parat, una rica divorciada 14 años mayor que él, con la que acaba casándose; y Florence Marmon, exesposa de un magnate de la industria automovilística, con la que se entrega a una vida de desenfrenos. No importa que la guerra civil lo pillara en España, que Francia lo enviara a un campo de refugiados republicanos, que tras el estallido de la II Guerra Mundial fuese a parar a un campo de concentración de Dachau o que, una vez caído Hitler, los rusos lo condenaran a más de dos décadas de trabajos forzados en la gélida Siberia.

Author: Carlos Prego


Published at: 2025-12-07 14:30:13

Still want to read the full version? Full article