Ironías de la vida, un solitario disparo de un defensa bermellón servía para abatir a un Madrid sin defensa que remató doce veces en los 45 primeros minutos sin hacer blanco alguno, pero que aumentó el zafarrancho de combate en la segunda mitad, igualó por mediación de un Mbappé ávido por edulcorar la campaña con su primer Trofeo Pichichi y acabó volteando el marcador con un gol y una asistencia de quienes menos se esperaba. Una sangría de tal calibre que la primera misión de Carletto en su antepenúltimo día vestido de traje en la oficina consistía en mantener en todo momento al menos a siete jugadores de la primera plantilla sobre el césped para no incurrir en una alineación indebida. Con cinco intervenciones extraordinarias en la primera parte a disparos de Endrick, Bellingham, Modric, Mbappé y Valverde, el ibicenco sostuvo a un Mallorca que había restado picante al pleito manteniendo a Maffeo en el banquillo, resguardado de la inquina del Bernabéu, pero que necesitó poquísimo para hacerle daño a este Real Madrid famélico.
Author: ÓSCAR BELLOT
Published at: 2025-05-14 21:49:00
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