Es cierto que, por ahora, al igual que en el caso de Ucrania y Gaza, asistimos a un conflicto contenido, pero que constata la fragilidad de un mundo sujeto a un proceso de desconfiguración del orden mundial, en el que no sólo es visible la confrontación de EEUU y China por el rol de potencia hegemónica, sino también como emerge la visión estratégica de otros actores económicos que buscan un mayor reconocimiento e influencia en la toma de decisiones globales. De la misma forma, que los acontecimientos desencadenados en Oriente Próximo desde los atentados de Hamas el 7 de octubre de 2023, pero especialmente ante la escalada del conflicto entre Israel e Irán, han puesto de manifiesto la disrupción global que representaría que el régimen de los ayatolás optara por bloquear el estrecho de Ormuz. Así, durante la crisis financiera global de 2008, que provocó el rescate financiero de Islandia, a pesar de las necesidades de financiación el Gobierno optó por bloquear la compra por parte de inversores chinos de una gran superficie en la costa norte de la isla al constatarse que no respondía a fines comerciales, sino a otros complejos intereses.
Author: Alicia Coronil
Published at: 2025-06-28 22:02:44
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