El formato de la pantalla cambia, se rompe, en un esfuerzo por reflejar la psicología del personaje desde el estrecho espacio, casi cuadrado, que constriñe el rostro, el cuerpo y hasta el alma de La Pastora, hasta las proporciones panorámicas asociadas a su liberación, a su reconocimiento, al éxito de ser quien quiere ser. La distancia entre lo que podía ser en un mundo rural perfectamente reglado, sometido a normas que se antojaban inmutables y sin espacio para el disenso, y lo que era realmente le colocaron del lado de lo abominable, de lo innombrable incluso. Rodada en las comarcas de Els Ports y Baix Maestrat de Castellón, y en las de Montsià, Terra Alta y Baix Ebre de Tarragona (es decir, donde vivió Florencio), la película avanza por la pantalla como una interrogación, siempre pendiente de la incomprensión y el miedo que configuran el único espacio de imposible identificación del protagonista.
Author: Luis Martínez
Published at: 2025-11-09 15:36:06
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