Hasta ahora, la biotecnología había dependido en gran medida de la inserción de genes externos para modificar las funciones de los organismos. La novedad de este proyecto radica en que los investigadores del CSIC y del BSC-CNS han conseguido que las bacterias aprendan a degradar plásticos sin recurrir a ADN externo, es decir, sin el habitual “injerto” de información genética foránea. El plástico es uno de los grandes enemigos ambientales de nuestro tiempo, con millones de toneladas acumulándose en mares y vertederos.
Author: Martín Nicolás Parolari
Published at: 2025-08-23 15:55:10
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