Lorca es uno más, un símbolo capaz de cambiar la percepción de toda una sociedad con sus palabras y su vida, pero uno más de los cincuenta mil andaluces que fueron asesinados y tirados en 702 fosas por toda Andalucía: “En Andalucía tenemos la mitad de las víctimas del franquismo de toda España, en veinte años no se han llegado a recuperar todavía ni cinco mil cuerpos”, dicen en la obra. La obra comienza frontal, los tres integrantes de la compañía, la propia María San Miguel, Alba Muñoz y Pablo Rodríguez, entran en escena con el puño en alto cantando En la plaza de mi pueblo, canción de guerra de la CNT-FAI que, además de hacer alusión al grave problema de desigualdad en los latifundios andaluces de la época, tiene música. Así se recordará al alcalde de Alcanadre en La Rioja a quien de las almendras que guardaba en el bolsillo del pecho le floreció un almendro, al niño de once años que recuperaron del fondo de una fosa (fue el primero en caer) en el propio Barranco de Víznar donde también se creyó que pudo ser enterrado el poeta.
Author: Pablo Caruana Húder
Published at: 2025-09-09 20:43:56
Still want to read the full version? Full article