Álex Márquez, a lomos de la Ducati del Gresini, se quitó por fin el rol de actor secundario y puso fin (otra vez, después de Jerez, esta vez sin caídas y en la sprint) al pleno de su hermano. Fue de menos a más, metido en todas las peleas, y terminó en el podio, tercero, aprovechando el bajón de Pecco y la guerra fratricida de los Márquez. De hecho, lo mejor de la carrera fue la última vuelta donde a Bagnaia le arrabataron el podio, y hasta Zarco se impuso a él con un adelantamiento épico.
Published at: 2025-05-24 15:24:07
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